Columnista invitada: Macarena Marín

Creo que es lo que trata de rescatar de la coreógrafa PINA, el director en este precioso documental que me cautivó de principio a fin.

La danza es parte de nuestra vida, de nuestro día a día. La danza es movimiento constante. La vida es un movimiento constante.

Pina Bausch nos quiso enseñar eso en cada una de sus coreografías, mostradas en este documental.

Un documental que nos muestra el mundo de la danza, poco conocido por muchos. Ensayos, presentaciones, interacciones entre compañeros de escenario. Nos muestra que la danza se puede crear desde cualquier situación, en cualquier espacio y con todo tipo de movimientos. Nos muestra además que no hay una edad específica para vivirla y que cada día de baile está lleno de sorpresas.

Un documental que con tiempo preciso (1 hora y un poco más) nos muestra la pasión de una mujer que vivió su vida en danza, que dejó muchas enseñanzas en cada uno de sus cuadros imaginarios, representados orgullosamente por cada uno de los que formaron parte de su elenco y que sin duda seguirá viviendo por siempre.

La frase «Danzad, danzad o estaréis perdidos» yo me atrevo a traducirla a «Vivid, vivid o estaréis perdidos«. Para mí, es lo mismo y tengo este documental de respaldo.

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