Día viernes, 14:30 hora local, y yo creo que en todo chile estábamos esperando, que la pelota empezara a rodar y ver lo que podría ser el histórico triunfo de la roja sobre los “ezpañolez”, esto nos dejaría primero en la tabla con 9 puntos, y de esa manera evitar a Brasil en 8vos de final.
Minuto 25´ y una mala salida de nuestro portero, Claudio Bravo, nos deja abajo en el marcador. Al minuto 40, Iniesta nos pone la segunda diana, y Marco Estrada, que se notaba muy nervioso, es expulsado, dejado al equipo con un jugador menos, en contra del segundo mejor equipo del mundo, según el ranking de la FIFA. Termina el primer tiempo, y todos nos paramos, vamos al baño, y comentamos lo que fueron estos 45 minutos iniciales. La esperanza es lo último que se pierde y eso fue nuestro pensamiento a seguir.
Comienza el segundo tiempo y con tres cambios en el equipo, chile sale a jugarse el todo por el todo. A los 2` el recién ingresado Rodrigo “Chino” Millar hizo levantarnos del asiento, gritando un gol que con todo lo ocurrido en el primer tiempo, nos hacia soñar con un empate, y por que no, con ganar el partido. Chile atacó, a pesar de ser menos numéricamente. Fin del partido, 2-1 a favor de España, pero se logró la clasificación.
Eran sentimientos encontrados, clasificábamos, pero perdiendo, y un saldo negadito aún, jugaremos en los 8vos de final contra la “Bestia negra” de chile, Brasil. Personalmente, no quería celebrar, tenia sentimientos encontrados. Pero fueron mis amigos, los que me motivaron, y terminamos en las banderas, gritando con todos los iquiqueños que se reunieron en ese punto.
El hecho de ver tanta alegría, tanta felicidad en la gente, me cambiaron el switch, y me hicieron recordar que somos hinchas, y que tenemos que alentar en las buenas y en las malas. Hay que vivir el mundial a concho, y celebrar todo lo que se logre. Ojala que el lunes les ganemos a los brasileños, sigamos derribando mitos, y haciendo historia.
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